Pensar

La palabra pensar deriva del latín (pendere) colgar, pesar, sopesar. Y la figura alegórica se manifiesta cuando ponemos en una balanza una cuestión y sopesamos los argumentos a favor y en contra para tomar una decisión. De esta misma raíz surgen las palabras com-pensar, dis-pensar, recom-pensar, indis-pensa-ble, pen-sión.

El pensar es una de las facultades más bellas que posee el hombre pero extrañamente actúa como si no la tuviera, al parecer cuesta, actuamos muchas veces por una serie de factores que hacen a las diferentes inteligencias: emocional, práctica, pragmática, empírica, y hasta el sistema automático del hábito, pero.... dejamos de lado el viejo sistema de sopesar. Pensar, al parecer, es el trabajo más difícil que existe. Quizás, esa sea, la razón por la que haya tan pocas personas que lo practiquen. 

Los muy inteligentes muchas veces cometen errores muy tontos por no pensar, como se saben inteligentes se confían y eso es mortal cuando debemos tomar decisiones importantes.

Ahora bien, no se debe confundir pensamiento con conocimiento, porque conocimientos puede tenerl cualquiera, pero el arte de pensar es otra cosa. Había un dicho popular que rezaba: “Allí pasa un profesor que sabe mucho pero posee una ignorancia enciclopédica”. Justamente hoy en día se maneja mucha información pero lamentablemente ya viene deglutida cosa de que la gente no piense, además ya no lo necesitan, otros piensan por ellos. “Donde todos piensan igual nadie piensa”.

Nos dice Francis Bacon: "Quien no quiere pensar es un fanático; quien no puede pensar, es un idiota; quien no osa pensar es un cobarde" pero lo cierto es que en la sociedad, cualquiera sea: capitalista, comunista, fascista o cualquier "ista" el pensar es peligroso. Toda sociedad tiene un sistema y ese sistema debe ser ordenado. Todo sistema necesita manipular, conducir, presionar, organizar, reprimir, sistematizar. Los sistemas más rígidos son los religiosos y los militares, será por eso que siempre andan de la mano. La educación en estos sistemas está diseñada para obedecer, no para pensar, se educa para formar opas útiles, dóciles, mecánicos, ritualistas, rutinarios y muy poco creativos. Todo síntoma de rebelión, disentimiento o crítica es reprimido y sancionado. 

Toda práctica educativa involucra una práctica política ya que se relacionan e interactúan valores, proyectos, ideales, cuestiones sociales y fundamentalmente objetivos ideológicos. La educación nunca es neutral, puede estar orientada a dominar, a emancipar o a distorsionar. Que diferente sería una sociedad que oriente la educación hacia una idea emancipadora, pluralista y destinada a incluir e integrar a todos los sectores, especialmente a los más vulnerables. Educadora de conciencias, creadora de sujetos y jerarquizadora de educadores.

No hay ninguna razón por la que no se pueda enseñar a un hombre a pensar, obséquiales a tus hijos este principio y pondrás a su alcance la verdadera idea de libertad.

José de Guardia de Ponté

 

E-mail: [email protected]